Escándalo en Las Grutas: pelearon vendedores de la playa y tuvo que intervenir la policía

Un altercado entre vendedores ambulantes que recorren la playa del balneario Las Grutas generó asombro y tensión entre los miles de veraneantes que disfrutaban del mar y el sol.

Todo ocurrió en el sector de la Primera Bajada y tuvo epicentro en la parte superior de la escalinata y la rampa de acceso, que se transformaron en un escenario frente a la multitud. Tuvo su momento jocoso, cuando una mujer allegada a uno de los contendientes comenzó a lanzar gritos desde lo alto, y recibió un sinnúmero de respuestas, entre insultos y frases hilarantes.

Aunque luego el incidente tomó ribetes más delicados, porque tuvo que intervenir la policía y dos de los protagonistas fueron demorados por “atentado y resistencia a la autoridad”, ya que no estaban muy de acuerdo con ir a la comisaría. De todos modos a las pocas horas fueron liberados.

El comisario Rubén Osman, jefe de la Unidad 29na, informó que el conflicto se desató por un celular. Al parecer uno de ellos le había prestado el teléfono al otro, pero este último no se lo habría devuelto.

El reclamo, efectuado en el lugar de trabajo de ambos y ante una gran cantidad de personas, fue levantando temperatura hasta llegar a un cruce físico.

A los pocos minutos aparecieron uniformados peatonales que recorren la costa y los que transitan por el sector céntrico, una tarea incluida en el operativo de seguridad que diagrama la fuerza para la temporada turística.

Los policías intentaron calmar a los contrincantes, que estaban muy alterados.

Entonces procedieron a retirarlos de la playa para conducirlos a la comisaría.

Lo que siguió quedó registrados en videos, ya que varios testigos habían encendido las cámaras de sus celulares para grabar el episodio, y las imágenes que tomaron las subieron a las redes sociales que rápidamente se viralizaron.

La intervención de una mujer

La salida fue por la rampa de la Primera Bajada. Uno de los hombres mientras era llevado por dos efectivos fue dándole piñas a las barandas, como muestra de su calentura, aunque no quedó ahí.

La muchedumbre entonces comenzó a lanzar expresiones de distinto calibre. Pero en ese momento apareció una mujer en uno de los rellanos de la bajada -se presume que tiene relación con uno de los vendedores- que comenzó a viva voz a increpar a la gente.

La respuesta no tardó en llegar. Le gritaron de todo. Algunas cosas, aunque con tono discriminador, generaron carcajadas.

A esa altura el evento se había convertido en un escandaloso espectáculo, que se complicó más arriba.

Reducido y esposado

En el último tramo de la escalinata que conduce a la plaza donde está el Paseo de los Artesanos, el muchacho se puso más bravo. Los policías lo redujeron en el piso y lo esposaron.

El procedimiento generó la concentración de gente y hasta algunas personas se manifestaron contra la actuación de los efectivos.

Según trascendió, uno de los demorados es de San Antonio Oeste y el otro de Villa Regina. Ya están libres, pero deberán solucionar el desencuentro para seguir trabajando con tranquilidad el resto del verano.