Quién es el poliladron y la decisión de Alberto Weretilneck de exponerlo públicamente

En la tarde de hoy se dio a conocer que el oficial de la policía rionegrina detenido por su presunta participación en un violento asalto en Cipolletti fue imputado con prisión preventiva por el término de un año, el máximo prevista en esta instancia.

En la misma audiencia, la defensa privada a cargo de Alfredo Cury solicitó la prohibición de difundir imágenes y datos personales del hombre. Tanto fiscalía como la querella adhirieron al pedido ya que en el marco de la investigación penal preparatoria deben realizar, entre diversas medidas de pruebas, ruedas de reconocimientos.

El Juez de Garantías interviniente, Juan Pedro Puntel, hizo lugar a tal petición “para evitar que se frustren medidas probatorias que pueden estar pendientes” y dispuso la prohibición de “publicar el nombre y la imagen del señor”.

A pesar de ello, el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, decidió publicar en su cuenta de X una foto del ahora imputado, donde repudió al accionar del efectivo y además agregó el nombre y apellido. La publicación la encabezó con: "No voy a tolerar policías que traicionen el uniforme".

"Enzo García, un efectivo de la Policía de Río Negro fue detenido, y la Justicia le dictó prisión preventiva por un año, acusado de haber participado en un violento robo" indicó.

En su tuit, Weretilneck advirtió: "No voy a tolerar desviaciones en la conducta de quienes tienen el deber de cuidar a la sociedad" y continuó "no es negociable. En este gobierno, el que se corre de la ley, se queda afuera".

A pesar de la orden judicial de no dar a conocer su identidad ni difundir imágenes del policía, el gobernador tuiteó minutos antes de las 15 y varias horas después, mantuvo su publicación activa.

Una audiencia caliente: amenazas a periodistas y fotógrafos

El policía imputado se mostró muy hostil con los trabajadores de prensa que acudieron a la audiencia para realizar su trabajo.

Apenas vio entrar a la sala a periodistas, fotógrafos y camarógrafos, comenzó a advertir que no debían tomarle fotos, y le ordenó a una mujer -al parecer su pareja- que ella también les tomara fotos al personal de medios, con la amenaza que presentaría denuncias. Y así lo hizo la joven.

El Policía, de 40 años, es nacido en Cipolletti, donde trabajó en la Comisaría 24 y también en la 26 de Fernández Oro.

Cómo fue el violento asalto en Cipolletti

La acusación la describió la Fiscalía a cargo del fiscal Jefe Santiago Márquez Gauna, Vanina Bravo y Eugenia Vallejos. Relataron que el 20 de marzo minutos después de las 14:30 el policía vestido de civil con otros dos hombres aún no identificados se presentaron en el inmueble ubicado en la calle Brentana casi Alem a bordo de un Volkswagen Fox, en el que aún no fue encontrado.

Según la hipótesis, los tres bajaron del vehículo y mientras el acusado quedó en el exterior “haciendo de campana”, los otros dos sujetos, uno de ellos vestidos de policía con el uniforme que le habría proporcionado el mismo imputado, simularon ser empleados de la Anses, dado que poro antes habían recibido un llamado de ese organismo.

Sin embargo, cuando los atendió el dueño de casa, Juan Carlos Gorini, de 69 años y conocido como El Cheva, por la fuerza lo metieron para adentro de la casa y cometieron el atraco.

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El detalle indica que fueron muy violentos. El supuesto policía apuntó con un arma de fuego que llevaba a la cabeza del hombre, mientras el otro ahorcaba a su esposa María Ladavaz, de 70 años, a quien le exigían la entrega de dinero.

“Dame la guita y o lo mato”, le advertía, hasta que le entregó unos 3 millones de pesos. Pero no se conformaron y lo siguieron golpeando, incluido un culatazo en la cabeza, exigiendo más plata, porque “sabían que tenían un movimiento grande del banco”.

Bajo ese tormento la vecina admitió que tenían más dinero en una caja fuerte, de donde obtuvieron 20 mil dólares y joyas. Con el botín escaparon, dejando a Gorini mal herido, lo que derivó en que sufriera un ACV. Aún está internado con pronóstico reservado.

Se presume que no eran solo tres los ladrones que actuaron, sino que habría otros cómplices que se movilizaban en otro vehículo. El abogado Pablo Gutiérrez representó a la familia de las víctimas que se presentaron como querellantes, y adhirió a lo planteado por la Fiscalía.

Uniformes, esposas, réplicas de armas, balas y cartuchos

La Fiscalía realizó el lunes, una serie de allanamientos en General Roca que causaron enorme conmoción. Uno de ellos fue en la Subcomisaría 69° del barrio Nuevo, donde el acusado prestaba servicios. En ese lugar le secuestraron su celular, le colocaron las esposas y lo trasladaron en un patrullero.

El trámite incluyó la requisa de su auto, un Chevrolet Corsa estacionado frente a la dependencia policial, en el que encontraron un chaleco antibalas, un par de esposas, linterna, cuchillos, cargador de 14 municiones, una réplica de arma de fuego color negro, cuatro gorras de la Policía, una granada de gas lacrimógeno, guantes, una cachiporra, 15 municiones calibre 19 mm, tres cartuchos de escopeta, otros 16 cartuchos de escopeta en un estuche, 25 cartuchos dentro de una caja.

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El auto del policía detenido fue requisado frente a la Subcomisaría 69 de Roca.

Ministerio Público Fiscal

También allanaron la casa del policía ubicada en la calle Gavilán de Roca, donde secuestraron su arma reglamentaria, una picana, más balas y cartuchos, cuatro bombachones policiales, otras prendas de vestir, calzados, lentes oscuros y una remera, que habría utilizado el día del asalto.

También hicieron una requisa en la Comisaría 21 también de Roca, donde anteriormente trabajaba el imputado, y secuestraron en un casillero otras dos réplicas de armas de fuego.