Otro tiroteo vuelve a sembrar el pánico en las 1200

Una nueva balacera se registró recientemente en el barrio 1200 Viviendas de Cipolletti, ya convertido en un lugar riesgoso, sobre todo cuando llega la noche. El grado de peligro lo advierten los propios vecinos, que piden mantenerse en el anonimato por temor a represalias. Pero además lo confirman la cantidad de hechos violentos con resultados fatales que han ocurrido a lo largo de los años, pero que se han agravado en los últimos meses.

Hubo innumerables muertes en un contexto en el que las drogas y la lucha por gobernar el terreno a fuerza de plomo y sangre aparecen como común denominador.

El último crimen ocurrió a mediados del mes pasado, cuando asesinaron a tiros a Luciano Quidel, de 27 años. La investigación apunta a que se trató de un enfrentamiento entre dos bandas enemigas y que el trasfondo del conflicto estaría vinculado al narcotráfico.

La semana pasada dispararon en dos oportunidades, en dos días consecutivos, una casa ubicada en la calle Antonio Turrín entre Manuel Estrada y Roberto Firpo. Hirieron a un hombre que se salvó de milagro, porque una bala le rozó la cabeza. Hay dos hermanos imputados y detenidos en prisión preventiva, acusados de haber ejecutado los ataques. Aún se desconoce la motivación.

Varios disparos, nada raro

El miércoles por la tarde/noche, alrededor de las 20, se escuchó otra ráfaga de disparos por esa misma zona del plan habitacional. Nada raro para los vecinos, que dicen que las detonaciones son comunes.

Policías de la Subcomisaría 79 -ubicada a unas tres cuadras- concurrieron de inmediato al lugar y se encontraron con una mujer que ofrecía un relato del incidente, pero que de repente aparecieron cinco personas más -cuatro hombres y una mujer- que increparon violentamente a la vecina.

El altercado, por la actitud hostil del grupo, llevó a los efectivos los demoraran para su identificación.

El comisario inspector Javier Yáñez, jefe de la Unidad Regional V, indicó que es gente conocida en el sector.

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Posteriormente, precisó en una entrevista por LU19, lograron determinar que los tiros habrían sido efectuados desde una moto por una persona que aún no está identificada. El jefe policial destacó que no hubo heridos ni daños. Tampoco encontraron armas ni ningún otro elemento vinculado al hecho.

Yáñez indicó que no desconocen el conflictivo escenario que presenta esa zona barrial y destacó trabajan para poner “todos los recursos de la institución para disminuir los hechos de inseguridad”.

Anunció que refuerzan los recorridos y que durante la noche se suman efectivos del COER -Cuerpos de Operaciones Especiales y Rescate-, que usualmente andan pertrechados para mantener enfrentamiento.

Sigue la investigación del crimen de Quidel

En tanto, sigue la investigación del homicidio a balazos de Luciano Quidel, ocurrido en la noche del domingo 16 de febrero durante un tiroteo desatado en la calle Celedonio Flores entre Covián y Scalabrini Ortiz, a unos 150 metros de la Subcomisaría 79.

El joven de 27 años domiciliado en Fernández Oro había ido con al menos otros dos hombres y a metros de una vivienda que ha sido objeto de allanamientos en varias oportunidades por su vinculación con el narcotráfico, se enfrentaron a tiros con otro grupo de sujetos.

Su cadáver quedó tendido ahí, mientras que sus supuestos cómplices escaparon, como también la banda rival.

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La pista que siguen los investigadores los lleva hasta un enfrentamiento por el negocio de la droga, y que están decididos a todo.

Para mayor asombro, a las pocas horas del crimen un Volkswagen Gol resultó destruido por un incendio que se produjo en la calle Sáenz Peña entre Roca e Irigoyen. Lo habían dejado estacionado ahí y testigos afirman que aparecieron dos jóvenes y le arrojaron algo encendido al interior, y se prendió fuego en minutos. Mientras que los supuestos autores escaparon en una camioneta Ford Ecosport roja, según aseveraron vecinos. Los investigadores también vincularon el incendio con el asesinato de Quidel. Pero hasta el momento no se sabe de avances y la causa sigue abierta con pistoleros en libertad.