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Caos en un colectivo y un año de prisión: "si alguno se hace el vivo, los voy a apuñalar a todos"

Un hombre fue condenado por amenazas calificadas y tentativa de abuso en un micro. El hecho sucedió a mediados de año, cuando el individuo agredió a pasajeros y acosó a una mujer.

Un tribunal de Cipolletti condenó a un hombre a un año de prisión de ejecución en suspenso por amenazas calificadas con arma blanca, tentativa de abuso sexual simple y amenazas simples en el marco de violencia de género. La sentencia, dictada por la jueza Alejandra Berenguer, también incluyó la imposición de pautas de conducta durante dos años. El hecho ocurrió el 12 de julio de 2024, durante un viaje en colectivo entre dos localidades de Río Negro.

El imputado, quien presuntamente se encontraba bajo los efectos del alcohol, comenzó a agredir verbalmente a los pasajeros mientras portaba un cuchillo. Según el fallo, el hombre amenazó a los ocupantes del vehículo diciendo: “si alguno se hace el vivo, los voy a apuñalar a todos”, lo que generó temor en el grupo.

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En el mismo trayecto, acosó a una pasajera con comentarios intimidantes y posteriormente intentó besarla contra su voluntad, sujetándola del rostro. Además, llegó a tirarle del cabello y le realizó amenazas directas, obligándola a permanecer junto a él mientras decía: “te voy a agarrar como rehén”.

Un pasajero logró alertar a la policía, que interceptó el colectivo en una estación de servicio y escoltó la unidad hasta la terminal de destino. Allí, los agentes detuvieron al acusado y secuestraron el arma blanca que portaba.

Amenazas y tentativa de abuso

Durante la audiencia de juicio abreviado, el imputado aceptó los hechos y la calificación legal propuesta por la fiscalía, que incluyó los delitos de amenazas calificadas por el uso de arma blanca, tentativa de abuso sexual simple y amenazas simples, en el marco de la Ley 26.485 de protección integral contra la violencia hacia las mujeres.

La pena acordada consistió en un año de prisión en suspenso, con la imposición de pautas de conducta, entre ellas, la prohibición de contacto con la víctima y la obligación de fijar domicilio. Además, deberá abstenerse de consumir alcohol en exceso o estupefacientes en la vía pública y realizar presentaciones periódicas ante la comisaría de su domicilio.

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El fallo consignó que el imputado no poseía antecedentes penales y que los hechos fueron presenciados por numerosos pasajeros, quienes aportaron sus testimonios. La jueza consideró que la evidencia presentada y el reconocimiento del acusado permitieron acreditar la existencia del hecho.

El condenado deberá fijar domicilio, no ausentarse en forma prolongada ni mudarse sin notificar al Juzgado de Ejecución, abstenerse de cometer nuevos delitos, evitar el consumo excesivo de bebidas alcohólicas o estupefacientes en la vía pública, realizar presentaciones bimestrales en la comisaría asignada a partir de diciembre de 2024, y mantener prohibido todo contacto con la víctima, incluido por redes sociales, bajo apercibimiento de revocarse la condicionalidad de la pena en caso de incumplimiento.

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